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DesobedeSer: «Jesús de Miami»

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¿Cuál Navidad? ¿La canción de Coca-Cola? ¿La muda de ropa nueva y una pose calibrada para lograr que la selfi de la reunión familiar no huela a publicidad engañosa?

¿Cuál Navidad? ¿La de la mitad del planeta muerta de hambre y estratégicamente saqueada para qué la rueda fordista continúe girando? ¿La de José, María y los ángeles desaparecidos bajo los escombros? ¿La del pesebre como un cráter? ¿La de tres tipos disfrazados de Reyes Magos y sus cuerpos repletos de bombas?

¿Cuál Navidad? ¿La de la fila de marionetas para entrar a la inauguración de Starbucks o al estreno de un supermercado? ¿La de Pedro haciendo changas de Papá Noel, en negro? ¿La de la oscuridad, iluminada por las lucecitas de un árbol de plástico, de las cenas en casas donde no puede hablarse de Dios y el Estado o de fútbol a sol y a sombra?

¿Cuál Navidad? ¿La de Belén…? ¿La de Belén rodeada de tanques, alambres de púas y trincheras? ¿La de Belén, poblada por los fantasmas de niños palestinos que entre los cadáveres buscan sus juguetes despedazados?

¿Cuál Navidad? ¿La del ser, sin más poder de encontrarse a sí mismo, que saliendo de compras? ¿La de la mitad de la población bajo la línea de pobreza? ¿La del brindis con Fresita? ¿La del trineo de nieve en pleno verano?

¿Cuál Navidad? ¿La del buzón de cartas a Santa a veinte metros de una madre que duerme a la intemperie? La de sordos y frívolos adornos que rezan: “Paz y amor en el mundo”.

Como si la realidad fuese otro programa de cable para hacer zapping en la tele.

Como si vivir meramente se tratara, de no inmiscuirse con la vida…

Autor: Walter Stickar.